En algún momento escuche que cada noche al dormir… morimos para resucitar a la mañana siguiente al abrir a los ojos… es decir que al año morimos unas 365 veces… y resucitamos una cantidad similar de ocasiones… metafóricamente hablando cada día empezamos de cero… con experiencias nuevas tocando a la puerta… con nuevas ilusiones… nuevos bellos riegos… nuevas oportunidades…
Es decir que nuestra libreta… bitácora… todos los días la podemos re-escribir… si tan solo logramos desprendernos de esa carga del día anterior… y también de esa preocupación que por cierto es inútil porque nadie puede prever que es lo que está por venir… y entonces si podríamos disfrutar más… sufrir más… vivir más… porque francamente todas las elecciones a las que nos enfrentamos suelen desencadenar en vida o muerte… de alguna parte de nuestro ser…
No es solo respirar… no es solo el latir de nuestro corazón…hay un poco mas… nuestra alma… esa que nadie logra definir con exactitud… no solo depende del alimento… ni del oxigeno… es mucho más compleja… está llena de ideas… ilusiones y desilusiones… es esa parte dicótoma de nuestro ser donde se encuentra diariamente la bondad y la maldad… y en ese pulso diario… mueren trozos de nuestro ser… y sobreviven otros…
Nos recetan diariamente con malas noticias… se nos hace tremendamente difícil… escribir un capitulo nuevo en este libro que se llama genéricamente vida… que individualmente cada quien le encaja la trama de comedia… tragedia… suspenso… terror… o una buena mezcla de cada cual…
Hay días que son prácticamente lagrimas… y otros que son una sonrisa… hay días que somos más vulnerables al ambiente… y otros que mejor ni decir… y aunque se me escapa la razón… creo que esto de racionalizar todo… es quizás lo que nos jode… porque me cuesta imaginar que todo tiene una explicación lógica… la lógica es tan falible… como no poder lograr imaginar un fin que no sea vivir mejor…
Todos los días una página en blanco… todos los días una nueva oportunidad de firtrear con la vida misma… de sacar el máximo de lo poco que tenemos… cada día… una nueva historia que quizás no pase a los anales de historia mundial pero sí que en definitiva haga la diferencia para uno mismo… ese hola que no se diga hoy… quizás mañana no se pueda decir… ese que tal un café ahora más tarde es ahora o nunca… que al final mañana es solamente una posibilidad…
La vida se nos puede presentar en algunas ocasiones como una tormenta de proporciones épicas… pero en otras puede ser un carnaval… y muchas veces parecemos olvidar que no hay mal que dure más de lo que queramos… muchas veces pretendemos estar de luto de por vida… olvidando que la luna y el sol están en un constante baile para recordarnos que todo es pasajero… en esa danza que nos durara mientras nos dure la vida…
He llorado… he sufrido… y he pensado… que cada lagrima es solo abono para las próximas sonrisas que se están de camino… pero que sufren atrasos por nuestra costumbre a arraigarnos de mas a todo lo de este mundo que es tan pasajero como la vida misma… nuestros peores fracasos los resguardamos como si fuesen lo mas importante en nuestra vida… sin percatarnos de que son pasado… son parte del bagaje que nos ayudara a disfrutar mayormente los próximos escenarios parecidos…
Que nunca voy a sentir lo mismo por nadie más… que nadie me va a querer como esa persona… que amigo como aquel nunca voy a encontrar… pues en efecto si cierro las puertas… nada va a cambiar pero perfectamente todo está por cambiar… todo está por ponerse mejor… porque a la próxima persona que pase por esta acera le daré un motivo para reír… le daré una razón para recordar ese día…
La normalidad está sobrevalorada… los cuerdos estamos de crisis… mientras los locos que vienen de camino la siguen pasando igual que siempre… creo que los locos han descubierto que necesidades son únicamente comer, dormir y reír… mientras la normalidad nos hace querer mas… más cosas inútiles… más cosas para llenar ese vacío no existente… esas necesidades auto-impuestas…
Loco siempre he sido… pero loco comedido… y la verdad que me quiten lo bailado… nadie escarmienta por cabeza ajena… nadie sabe a que vino a este lugar… nadie sabe porque aquí en este terruño… nadie sabe porque las fronteras… nadie sabe porque hoy llora y mañana ríe… la normalidad me ha hecho un forajido de la sociedad… un marginal a la amargura… un infeliz feliz… un alma en pena por todos los que son normalmente sufridos…
Y para cerrar… así como dice Sabina… en sus Noches de Boda… “…Que el fin del mundo te pille bailando…” la normalidad está sobrevalorada… la vida como normalmente esta vista está de luto… que ahora nos toca a los un tanto locos… sonreír… que el que tiene hambre no puede tener hambre toda la vida… que todo cambia… se transforma…
MUNDOGS
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